Me comprometo a Ser Mujer

Mujeres: La “diosa” que sostiene el principio femenino que habitamos nos recuerda a cada instante reconocernos en el espejo de la luna, sus ciclos vitales, que gobierna las mareas de nuestro cuerpo y de nuestra psiquis.

Este flujo constante es el modo de peregrinaje que asume el femenino encarnado.

Aceptar en un cálido abrazo nuestra naturaleza lunar es un acto de conciencia y es, sin lugar a dudas, muestra brújula y protección durante el camino.

Cuando no acompañamos este movimiento permanente y nos detenemos en una resistencia temerosa restringiendo el fluir natural de la energía de nuestro ser, necesariamente tenemos que usar combustible para contrarrestar esta corriente de vida.

La desvitalisación, el agobio, la opacidad, el resecamiento de las ilusiones, la desesperanza, la tristeza... son los intrusos que invaden y socavan nuestra psiquis salvaje creadora y vivificante.

Honrando la energía femenina

mercoledì 20 agosto 2014

Joana Ukali


Tu fuerza proviene de eones de experiencia,
la de aquellos que te han precedido.
El camino está abierto, para ti, por ser la persona
que tus dones te llevan a ser.
Sientes, finalmente de ser.
Bien, mi querida,
estás en el inicio de un nuevo período en la vida.
Sacúdete y sabe que esto es cierto.
La mujer de tus experiencias pasadas
está preparada a ponerse a un costado por esta mujer emergente
que en este momento deseas ser.
Los susurros de tu corazón, son verdaderos, mi querida.
Escúchalos atentamente porque son tu guía.
La oruga está lista a emerger en su nueva forma.
Y tú también.
Vuela mariposa, vuela.

Clarissa Pinkola Estés

SUEÑOS: A PESAR DE TODO, NOS LEVANTAREMOS

Cuando los sueños atrevidos dejaran de realizarse,
también las acciones audaces en la Tierra dejarían de existir.
Los sueños audaces son el combustible necesario
para el motor del Hacer.
Los sueños audaces son el fusible de oro
para la fuerza vital del Ser.
Lo que no se puede soñar
no se puede hacer.
Levántate!
No te impidas soñar,
sembrá por todas partes
los sueños mas hermosos,
los sueños más audaces
que se escapan del Alma con un rugido.

Del libro: Forte è la Donna.